La OMS advierte "La carne roja y procesada"... ¿Quieres saber más?
Para nosotros, los dietistas-nutricionistas, estos días están siendo de revuelo total debido al comunicado que lanzó la OMS el día 26 de Octubre. Desde ese día me he reído mucho viendo los memes que circulan por internet sobre el tema, y es que a todo hay que echarle humor, pero es un tema importante y muchas personas acuden a nosotros a fin de que les informemos de qué es realmente lo que han dicho y buscando una explicación más cercana, y para eso estamos, así que me pongo serio y a vuestra disposición para cualquier duda que os quede tras leer este mini post al respecto.
A penas se produjo el titular, saltaron las alarmas en todo el mundo, y es que la industria cárnica resulta ser un lobby de los más importantes de la alimentación. Así que cabe esperarse que exista una rápida respuesta al respecto y todo tipo de teorías sobre la información publicada. A favor y en contra. Por lo que debéis juzgar críticamente la información aunque quien la diga sea un profesional de la salud.
Importante decir que lo que hay publicado es un resumen del estudio (un meta-análisis) en la revista médica The Lancet, el informe oficial todavía no se ha publicado, y esperemos que no tarden mucho en sacarlo a la luz. Tras leer muchos artículos sobre el tema y comentar durante días con colegas de profesión, nos planteamos muchas preguntas y voy a intentar daros directamente las conclusiones.
Lo primero que debes saber es que, si haces caso a la OMS tienes que hacerlo en todo, no sólo en las alarmas, quiero decir, la OMS ya estableció que la carne roja en ningún caso está recomendada en una dieta saludable como consumo diario, es de consumo semanal y el embutido de consumo esporádico, lo que quiere decir que no debemos consumir estos productos cada día.
¿Qué más dice el informe?
Después de tener claro que la carne roja no debe consumirse a diario y que la base de la alimentación saludable deben ser verduras, frutas, legumbres y cereales y deben ir acompañadas de ejercicio físico moderado 3-4 veces por semana, se ha llegado la conclusión de que las personas que consumen carne roja a diario tienen un riesgo mayor de padecer cáncer de colon que la población que sí sigue las pautas de alimentación y ejercicio adecuados, precisamente porque además de consumir carne, cuidan menos los hábitos de vida (Y hablo en general, nadie debe darse aludido en el mal sentido) que las personas que sí llevan este control más estrictamente.
Bien, el estudio establece a la carne roja (toda la carne de res: ternera, buey, caballo, oveja, cabritillos, cerdo... ah! Y avestruz, sí sí, el avestruz es carne roja también) y los procesados cárnicos (embutidos, salchichas, hamburguesas...) al mismo nivel DE EVIDENCIA que el tabaco. ¿Qué quiere decir esto? ¿Qué fumarse un cigarro es igual de nocivo que tomar unas lonchas de salchichón? NO. Quiere decir que se ha demostrado eficazmente que consumir estos alimentos y fumar tabaco, aumenta el riesgo de cáncer en ambos casos, pero no en la misma proporción. Tomar estas carnes, aumenta el riesgo de cáncer colorectal un 18%, y os aseguro que es muchísimo. Por lo tanto, debemos saber leer un artículo científico, y aunque como periodista, entiendo el atractivo del titular también, antepongo mi ética como nutricionista y me ofrezco a aclarar las dudas que tengáis, en la medida que yo sepa la respuesta.
Sin haber leído el informe completo, todavía no ha quedado claro si lo que incrementa el riesgo en estos alimentos, es la materia prima (carne roja) o los aditivos que le acompañan a la hora de darles tratamientos tecnológicos para elaborar las piezas, conservarlas... Por lo tanto, si son los aditivos, la industria pronto realizará cambios en sus líneas de investigación con el fin de conseguir productos idénticos con otros ingredientes. Pero ¿qué ocurre si realmente es la carne o alguno de sus componentes de origen? Ahí es donde está el dilema.
¿Va a favorecer esta situación un cambio a mejor en el consumo de alimentos?
Sinceramente, me encantaría que sí, pero lo dudo. La dieta mediterránea está comprobado que reduce la prevalencia de enfermedades como obesidad, diabetes tipo II, cardiopatías diversas, cáncer... pero estas pautas saludables son las que os he puesto antes, no las de comer rápido, cualquier cosa, atiborrarse de productos ya elaborados y costumbres similares. Esa no es la cultura mediterránea.
Me gustaría remarcar la importancia que tiene la alimentación que llevamos día a día en la calidad de vida cuando vamos cumpliendo años. Algunas personas que me preguntan son relativamente jóvenes y argumentan que están genial alimentándose así, y mi respuesta siempre es que, si con 20, 30 o 40 años no estás bien, ya es un mal comienzo. Hay que tener claro que la alimentación es un tratamiento de por vida y preventivo. Evidentemente hay que disfrutar de la gastronomía, también es un placer inmenso, pero debes tener la información necesaria para que seas capaz de decidir por ti mismo conociendo los riesgos a los que te expones, después de eso... cada uno es libre. Pero si decides aprender a cuidarte, que sepas que estoy aquí para ayudarte en lo que necesites.
